miércoles, 25 de julio de 2018
DEPRIMIDA
Pueden pasarte muchas cosas, pero generalmente las malas pasan todas al tiempo.
Empezamos hace 15 días con las vacaciones de David, que en realidad fueron casi 20 días sin verlo.
Luego el computador empezó a ponerse cada vez mas lento, así que tocó reiniciarlo pero al hacerlo perdí el Office.
Como no tengo plata, ni en donde caerme muerta, descargué un Office libre (no quería recurrir a mis hermanos, ellos me ayudan mucho, pero me siento un parásito cada vez que les pido algo), el cochino Office Libre me desconfiguró todo el trabajo que tenía que entregar. Pero al mal tiempo buena cara y lo intenté.
Luego el fué lo del tipejo ese con su manoseo, me sentí abusada nuevamente, tan sucia, tan asquerosa.
Finalmente se acabaron las vacaciones de David pero no pudimos hablar porque el Skype que instalé en el equipo no funcionaba y si yo lo veía el no a mi, así que al final solo ví una imagen cuadriculada de David.
Otra noche mas frustrada durmiendo llorando.
Finalmente no pude mas y llamé a mi hermano, junté la plata que tenía para el otro mes y le pedí el favor que me comprara el Office, el me hizo el favor y como siempre no aceptó que se lo pagara. (Soy un parásito e hermana), el hecho de poder trabajar me levantó el ánimo. Así que me puse juiciosa a imprimir pero la impresora empezó a fallar y comerse el papel. Hasta que finalmente dejó de funcionar. Respiré hondo y dije me preocupo mañana, ahora solo me voy a concentrar en poderme comunicar con David, así que desinstalé el Skype que no me gustaba e instalé el que si y !voilá! me logre comunicar con él.
Pero a mitad de la conversación se pusó furioso y me colgó. No valieron disculpas ni nada, y ahora no se si me va a volver a hablar.
Para poder seguir funcionando de alguna forma le escribí a Juan Carlos quien me prestó su impresora, y aunque esta también daña papel, logré imprimir dos documentos. Luego recibí un mensaje de mi mamá que no entendí y la llamé para que me explicara. De una me pegaron un regaño, y sin derecho a replicas. Fuí a pedirle la cita a mi tía y nada, me mandaron para la EPS donde después de esperar 1 hora me dieron una autorización para pedir la cita de ella en Dumian. Regresé a la casa. No tengo apetito así que pensé, voy a aprovechar el tiempo y trabajar porque las ganas de llorar me estan ganando. Y vaya al abrir la resma de papel que le había pedido a Jaime que me comprara, resulta que no la puedo utilizar porque es de papel reciclable y amarillo.
Estoy cansada, luchando con las lágrimas, la frustración.
Necesito que me regalen un abrazo o un montón de besos. Pero la única que me abraza es la almohada.
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